martes, mayo 05, 2020 0 Comments »

“Golpean al lobo hasta que este los muerda, para poder decir después que el malo era el lobo” (Leído por ahí)
Es una de las formas de acoso más básica, cualquiera sea la estrategia, es maltrato.
En Argentina es costumbre ya, generar rispideces entre personas, de esta forma muchos consideran su poderío, de tal forma que tarde o temprano esa misma ruptura los afecta, porque las grietas que siguen recibiendo golpes, o fuerza de empuje crecen y se estiran llevándose consigo todo.
Para justificar una mala actitud o acción, siempre es mejor generar un enemigo, es decir, el “culpable” (chivo expiatorio) de la deplorable actitud y así justificar lo hecho o la acción malévola.
Hace años que en Argentina se utiliza esta estrategia con la cual busca amansar a las “bestias” o bien justificar el daño.
Así, una pandemia cae por sobre el mundo y nosotros no somos ajenos a ello…
En este sentido, se dice que se cuida y protege la vida humana a costa del sacrificio económico, social y cultural. Quien se opone a esto es el “gorila”, el enemigo (lobo al que hay que golpear). Así los trabajadores independientes, los empresarios y los que generan la riqueza del país son los primeros y principales afectados de las políticas nefastas de un gobierno que simula gobernabilidad, pero que en realidad el único plan que tiene es la impunidad y el saqueo de las arcas del estado y de los bienes de los que supieron ganarse el dinero con su trabajo.
Cabe destacar, que la estrategia despectiva de mal hablar del otro para generar confusión y rispideces es también conocida, el rumor y los chismes son en definitiva las estrategias de los descerebrados que ante la imposibilidad de competir, solo les queda la de ensuciar una y otra vez a aquellos que los hacen lucir inferiores. (suena conocido, no)
José Ingenieros habló hace muchos años de la mediocridad, algo al que nos vemos sumidos desde hace años, en Argentina se castiga al que se destaca, al que sabe, al que busca, al que se arriesga, al que gana limpiamente, por el simple hecho de que no se soporta la grandeza ajena, porque la vagancia está a la orden del día y es la ley del menor esfuerzo lo que funciona en los ámbitos corrientes.
Así, un gobierno asume con total impunidad, con el poder de deshacer todo lo bueno que pudiera existir, sacrificando la historia y sus legados, dejando de lado el trabajo y el sacrifico de grandes ilustres personajes de nuestra historia, queriendo ocupar estos nombres, que tan inmensos les quedan, como el zapato de papá a un recién nacido.
Los malos son los que pagan los impuestos, los que trabajan, los que producen, los que generan riquezas, los que dan trabajo. Los malos son los que en el resto del mundo se conocen como los verdaderos ciudadanos.
Y se me vino a la cabeza, la palabra héroe, palabra más leída en literatura y comics, pero que últimamente sale en la prensa, sale en las redes, en las calles, el mundo, ahí es donde los que en plena pandemia están entregando la vida para salvar otras con su trabajo y esfuerzo, ahí aparecen el personal sanitario (todos los integrantes de este complejo sistema, no los funcionarios), los recolectores, los que dispensan alimentos, medicamentos y demás integrantes de la cadena laboral, que no pudieron acceder a la tranquilidad de sus hogares en cuarentena.
Paradójicamente, en Argentina, lo que es venerado y reconocido en el mundo, es castigado, hostigado y tratado como lobo malo, en tanto los presos asesinos y violadores descarnados, son considerados los ciudadanos del mundo. Con derechos y necesidades que aquellos que en verdad, producen y hacen un bien no tienen.
Qué cabeza retorcida considera liberar a gente que no tiene la más mínima intención de cambiar y ser mejores, salieron a robar, matar y violar nuevamente, y todavía se le paga por ello! Sí, se les paga por hacer eso, subsidios, planes y bonos… INCREÍBLE!
Argentina, un país al revés de la lógica y las buenas costumbres, donde la mayoría de los infectados fueron del personal médico por no tener las protecciones necesarias, donde se protege al asesino, al violador, al corrupto, por sobre el trabajador y el productor.
La pandemia nos está dejando ver las cosas… Cada uno debe ser responsable de lo que quiere ver. Después, después se darán cuenta de que somos todos lobos, que algunos fueron amansados y que otros, lamentablemente seremos los malos por querer salvar el poco de dignidad que nos queda.
Directo al bloqueo de Facebook, porque este gobierno, CENSURA! SEPANLO. 
Valeria Elías 

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